domingo, 24 de julio de 2011

Un gran resplandor

Gracias tía Sylvia Elena por tantos momentos tan buenos que nos diste en nuestra infancia, por toda esa alegría, por los festines, los viajes a Tucson, por tu sonrisa, por los regalos, por tu ejemplo, por todo lo que nos dejas ahora que te vas, por tus hijos que se hicieron nuestros primos, por las aventuras, por brindarnos tu hogar, por tus pláticas, por tu elegancia... Gracias.

Hoy te fuiste al Cielo a las 10 de la mañana, es domingo, 24 de julio del 2011. Hasta Siempre.

(Foto tomada por su hija Rebeca cuando salió del hospital el 25 de junio tras haber estado dos días en terapia intensiva después de una operación al corazón que duró 7 horas).