domingo, 27 de noviembre de 2011

Cariño de invierno.

Por la mañana, platicando por teléfono con mi mamá, me avisa que uno de los árboles de naranjo que sembró mi Nana Chú tiene 34 naranjas a punto de madurar y que la Mandarina ostenta 53 frutos (en Caborca); "te mandaré por Albatros en cuanto estén listas, sé que son tu medicina de invierno", me dijo mi mamá. Y así es, por medio de estas frutas recibo el cariño de mi abuela que partió de este mundo desde 1981, pero dejó su amor sembrado. Esperaré ansiosa entonces mi porción de cariño de invierno.